La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, participó este lunes en un debate en Todo es mentira (Cuatro), donde defendió la decisión del PP y Vox de vetar las celebraciones musulmanas en Jumilla (Murcia), y rechazó las críticas recibidas.
Esta medida, adoptada la semana pasada, es pionera en España al impedir la realización de fiestas de esta comunidad en espacios municipales y en la vía pública, lo que ha causado protestas y denuncias por parte de diversas asociaciones que la consideran un acto de “racismo institucional”. Incluso la Iglesia Católica expresó su oposición.
En el programa se recordaron las recientes críticas de Santiago Abascal hacia la jerarquía eclesiástica y la condena pública del padre Ángel respecto a la resolución del ayuntamiento murciano. Mientras la mayoría de colaboradores rechazaban la iniciativa, Aguirre solicitó la palabra para manifestar su discrepancia con la postura episcopal, argumentando que el Ayuntamiento simplemente estableció que el polideportivo se destinara exclusivamente a actividades deportivas o públicas.
El intercambio subió de tono cuando Susana Díaz sostuvo que la “ultraderecha ha generado un problema social inexistente” y culpó al PP de fomentar conflictos que no existían. Entre comentarios irónicos, Aguirre acusó al programa de estar “en su contra”, lo que motivó la réplica humorística del colaborador Miguel Ángel Martín: “Esto no es Todos contra Esperanza, es Todo es mentira”.
Este enfrentamiento evidenció que la controversia sobre el veto en Jumilla continúa dividiendo opiniones, tanto en la política como en los medios de comunicación.
