Especialistas del sector alertan sobre riesgos creativos, desafíos estratégicos y posibles pérdidas de valor debido a la integración del catálogo de WBD y la incertidumbre acerca del futuro de HBO.
La reciente operación que pone a Warner Bros. Discovery (WBD) bajo el control de Netflix ha provocado una reacción inmediata y variada en el ámbito de los analistas internacionales. Entre sorpresa y cautela, el principal foco de atención está en las consecuencias reales de unir uno de los catálogos audiovisuales más relevantes del mundo al gigante del streaming.
Posible pérdida de valor y las perspectivas de HBO
François Godard, analista en medios y telecomunicaciones de Enders Analysis, ha sido contundente al advertir que esta operación podría replicar errores anteriores.
Godard recuerda que la anterior fusión entre Warner Bros. y Discovery resultó en una pérdida de valor y alerta sobre el peligro de que esta situación se repita. También destaca el principal temor para el sector creativo: el devenir de HBO.
“HBO, reconocida por su alto nivel creativo en televisión, superó su etapa bajo Zaslav, pero ¿logrará hacerlo bajo Netflix?”, plantea Godard.
Una decisión lógica pero con complejidades
No todos los expertos comparten una visión crítica. Guy Bisson, CEO de Ampere Analysis, opina que esta acción es coherente y esperada, situando a Netflix en un modelo más parecido al de un estudio integrado verticalmente.
Según Bisson, esta operación:
- Agiliza un proceso que Netflix habría llevado a cabo en varias décadas.
- Le proporciona un extenso catálogo y propiedad intelectual de alto valor.
- Optimiza el rendimiento destacado del contenido de HBO ya disponible en Netflix.
Sin embargo, la mayoría de los analistas coincide en que la integración representa desafíos estratégicos significativos.
Desafíos estratégicos y operativos
Jack Davison, vicepresidente ejecutivo de 3Vision, resalta las diferencias entre los modelos operativos de ambas compañías:
- Estreno en cines: Netflix ha evitado tradicionalmente los lanzamientos cinematográficos, mientras Warner Bros. depende en gran medida de esta vía.
- Acuerdos de distribución: Existe incertidumbre sobre el futuro de los acuerdos globales de WBD con terceros operadores y socios comerciales.
- El futuro de HBO Max: Muchos consideran que Netflix no mantendrá un servicio competidor dentro de su plataforma, y especulan con la posible transferencia de HBO Max a otro actor importante del mercado, como Comcast.
- Canales lineales: La viabilidad a medio plazo de los canales lineales de WBD que no forman parte de la operación (por ejemplo, TNT o Eurosport en Europa) es cuestionable, lo que podría implicar su venta o reorganización.
En conjunto, esta transacción apunta a redefinir el panorama del poder audiovisual, pero deja muchas interrogantes sobre la integración operativa, creativa y regulatoria de dos grandes con culturas, modelos de negocio y prioridades muy diferentes.
