El joven lateral izquierdo español, en el radar del Real Madrid, no mostró su mejor versión frente a Boca Juniors. Superado por Advíncula, cometió errores con el balón y no destacó en su zona. Bruno Lage declaró: “Comenzó irregular, pero después mejoró”.
Las expectativas recaían sobre Álvaro Carreras en el debut de Benfica en el Mundial de Clubes contra Boca Juniors. El lateral zurdo español, objeto de interés para el Real Madrid, no cumplió con las esperanzas depositadas. Titular en su puesto, comenzó impreciso y se le notó nervioso en distintas fases del partido.
Durante la primera mitad tuvo un desempeño flojo, con pérdidas continuas y falta de acierto en sus avances ofensivos. Sus centros no fueron precisos y en varias ocasiones fue superado en la defensa. Además, quedó en fuera de juego en una jugada peligrosa. Boca supo aprovechar sus titubeos y Advíncula, su marcador directo, lo controló con eficacia.
Aunque registró un 89% de acierto en pases y ganó 5 de 8 duelos individuales según estadísticas de Sofascore, su contribución fue más por esfuerzo que por efectividad. Completó 3 de 4 regates, cometió una falta, recibió otra y recibió tarjeta amarilla. Su única acción relevante fue un disparo dentro del área detenido por Marchesín.
En los minutos finales, con Benfica volcado al ataque, Carreras mostró mayor confianza, aunque sus limitaciones en el mano a mano siguieron siendo evidentes.
El técnico Bruno Lage valoró su actuación: “Inició el encuentro de forma irregular, pero luego mostró mejoría. Estamos satisfechos con su rendimiento y él se siente cómodo en el club”.
Por su parte, Otamendi, en declaraciones posteriores, comentó acerca del interés del Real Madrid: “Álvaro es una persona humilde y dedicada. Si recibe una oportunidad, dependerá de su rendimiento”.
El futbolista aún tiene chance de cambiar la impresión dejada. El calendario ofrece una nueva ocasión ante Auckland City, antes del importante partido frente al Bayern. Sin embargo, para vestir la camiseta blanca, debe demostrar que puede afrontar el desafío. De momento, genera más incertidumbres que certezas.
