El delegado de Solidaridad en el Comité de Empresa de Trace, Juan Montoya, ha expresado su profunda preocupación ante las consecuencias negativas derivadas de la supresión de una de las rutas nocturnas de recogida de basura con camión de carga trasera en el servicio de limpieza. La situación ha llegado a un punto crítico, evidenciado por las quejas de los vecinos de la calle Álvarez, en el Recinto, quienes se vieron afectados al encontrar sus contenedores desbordados de residuos.
Montoya advierte que los tres camiones restantes no logran cubrir la ruta que antes realizaba el cuarto camión, que ahora opera durante el día. Esta reorganización ha generado una carga de trabajo significativa para los empleados, quienes se encuentran, según Montoya, «sobrecargados». La acumulación de basura sin recoger en algunas calles ha sido inevitable, afectando de manera variable a los residentes.
Esta no es la primera vez que Solidaridad denuncia esta problemática. Ya en diciembre, el sindicato alertaba sobre la retirada de uno de los cuatro camiones nocturnos encargados de la recogida de residuos, generando una sobrecarga para el resto de los vehículos. Montoya subraya que las consecuencias negativas de esta decisión no se hicieron esperar y critica que se suma a otras medidas perjudiciales para los trabajadores, especialmente desde que se plantea la posibilidad de municipalizar el servicio.
Desde Solidaridad se aboga por la municipalización como la única alternativa viable para mejorar la calidad del servicio de limpieza. El sindicato insta al Gobierno a agilizar el proceso de municipalización, considerándolo crucial para evitar más perjuicios a los trabajadores y garantizar un servicio eficiente a la comunidad.