Ceuta, 7 de agosto de 2025
La familia de Sodia Abdenabi ha publicado una denuncia donde acusa al sistema sanitario público de Ceuta de negligencia y abandono. Relatan una serie de fallos médicos que, aseguran, han puesto en peligro la vida de esta residente de la ciudad.
Durante más de un año, Sodia acudió en numerosas ocasiones a urgencias del Hospital Universitario por intensos dolores en la cabeza, oído, garganta y lengua. En cada visita, se le diagnosticaba una infección de oído y se le recetaban antibióticos sin realizar exámenes más detallados. La familia comenta que algunos profesionales se negaban a atenderla con argumentos como «ya saben lo que tiene».
Hace apenas quince días, un médico decidió realizar un estudio más profundo que reveló un tumor maligno en la garganta y lengua, confirmado mediante biopsia. A pesar de esta situación grave, los familiares denuncian que hasta ahora no han recibido ninguna llamada ni cita desde oncología. Explican que les aseguraron que serían contactados el lunes pasado, pero aún no han recibido comunicación alguna. Mientras tanto, Sodia continúa con dolores significativos y vive con ansiedad debido a la falta de atención y claridad.
El caso se complica por el estado de salud del marido de Sodia, que presenta estadios iniciales de Alzheimer. Sus familiares manifiestan que le han cancelado dos citas médicas por falta de personal. «Nos aseguraron que programarían una nueva fecha y la confirmarían por teléfono, pero ese contacto no se produjo», indican. El deterioro del esposo es perceptible y está acelerándose debido al estrés generado por la enfermedad de su esposa y la falta de apoyo institucional.
En el comunicado, la familia cuestiona directamente al sistema sanitario:
“¿Dónde está la humanidad en el sistema de salud de Ceuta? ¿Cuántas necesidades urgentes de los pacientes seguirán siendo desatendidas? ¿Por cuánto tiempo continuaremos con la escasez de médicos y el abandono institucional?”
Exigen una respuesta inmediata de las autoridades sanitarias, reclamando atención urgente y una revisión de los protocolos que, según ellos, han fallado profundamente.
“La salud no puede depender de la suerte. La dignidad de los pacientes no debe ser ignorada. La vida de Sodia y su esposo es importante”, concluyen.
Hasta el momento, no ha habido respuesta oficial por parte del INGESA ni del Hospital Universitario de Ceuta.
Redacción | Ceuta
