El Consejo de Ministros dio luz verde este martes a la nueva Ley del Medicamento, una reforma clave del sector farmacéutico que busca corregir lo que el Ejecutivo ha calificado como «un sistema profundamente desequilibrado». El documento completo de la ley ya ha sido publicado y marca un antes y un después en la regulación del acceso, distribución y control de los medicamentos en España.
Según fuentes gubernamentales, esta reforma pretende modernizar el marco legal vigente, garantizar una mayor equidad en el acceso a los tratamientos y mejorar la sostenibilidad del sistema sanitario. Entre las medidas destacadas se incluyen cambios en la fijación de precios, nuevas reglas para la dispensación en farmacias y hospitales, así como una mayor transparencia en la relación entre la industria farmacéutica y el sistema público de salud.
La ministra de Sanidad defendió la reforma asegurando que «se trata de un paso necesario para garantizar la salud pública en un entorno cambiante y con nuevos desafíos, como el envejecimiento de la población y el aumento del gasto farmacéutico».
La nueva ley ha sido bien recibida por algunas organizaciones profesionales del sector, mientras que otras han pedido un análisis más profundo de su impacto real en los pacientes y en la viabilidad económica de farmacias y laboratorios.
