El Ejecutivo ha finalizado en La Moncloa los detalles de una reforma constitucional diseñada para asegurar la protección del derecho al aborto, una iniciativa que se ha convertido en un símbolo político frente a la derecha.
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, junto al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, han concluido las negociaciones que permitirán presentar esta propuesta al Parlamento en las próximas semanas. Esta medida pretende consolidar el derecho al aborto como un principio constitucional y representa un desafío para el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, quien se encuentra entre la presión de los sectores más conservadores de su partido y una opinión pública mayoritariamente favorable a conservar la legislación vigente.
Por otro lado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha adoptado una táctica de confrontación directa con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, reconocida por su postura crítica hacia la reforma. Desde el Ejecutivo subrayan que el objetivo es garantizar la protección de los derechos de las mujeres frente a posibles retrocesos, mientras que la oposición en la Puerta del Sol acusa que se está utilizando este tema con fines electorales.
La reforma, que aún debe ser tramitada parlamentariamente, se vislumbra como uno de los debates políticos más significativos del periodo y podría influir en la dinámica entre el Gobierno y la oposición durante los próximos meses.