María Guardiola, presidenta de Extremadura y dirigente del PP en la comunidad, ha comenzado las conversaciones preliminares con Vox para evaluar un posible acuerdo de gobierno tras los comicios autonómicos. El primer contacto se realizó el pasado martes mediante una llamada telefónica al líder regional de Vox, Óscar Fernández, confirmaron fuentes de ambos partidos.
Guardiola comunicó este gesto al Comité de Dirección del PP de Extremadura en su encuentro del viernes. Según informaron fuentes del partido, la llamada fue breve y su propósito fue mantener abierta la posibilidad de continuar dialogando. Desde Vox han minimizado el intercambio, aclarando que no constituyó una negociación formal.
Este avance ocurre antes de la constitución de la nueva Asamblea de Extremadura, prevista para el 20 de enero. Desde ese momento, se dispondrá de un mes para negociar la investidura del próximo gobierno autonómico.
En una declaración a los medios después de la reunión, Guardiola manifestó que el enfoque principal de este contacto fue la estabilidad institucional. «El interés debe centrarse exclusivamente en Extremadura. No se trata de discutir cargos, sino de asegurar cuatro años de estabilidad y progreso para la región», aseguró.
La presidenta recordó que Vox ha propuesto nuevamente un documento con 200 iniciativas, idéntico al presentado meses atrás durante las negociaciones presupuestarias que no llegaron a buen término. Este paquete incluye la eliminación del registro de objetores sanitarios al aborto, la retirada de subvenciones a sindicatos, patronal y cooperación internacional, la derogación de la ley LGTBI y la supresión de la ecotasa. Estas propuestas fueron rechazadas por el PP en aquella ocasión.
Actualmente, el equipo de Guardiola está evaluando dicho documento para definir qué propuestas podrían incluirse en un potencial acuerdo y cuáles deberían ser revisadas o descartadas. Sin embargo, desde Vox insisten en que hasta ahora no se ha producido ninguna negociación concreta en relación con el contenido de dichas medidas.
Consultada sobre el margen de autonomía que tendrá durante estas conversaciones, la dirigente popular indicó que sus decisiones se basarán exclusivamente en el bienestar de la comunidad autónoma. «Las negociaciones dirigidas desde Madrid complican la situación. Mi prioridad es Extremadura», afirmó.
En paralelo, el recuento de votos de los extremeños residentes en el extranjero finalizó este viernes. La participación volvió a ser baja y no modificó la distribución de escaños ni el equilibrio político surgido tras las elecciones del 21 de diciembre.


