La Comisión Europea indica que el mercado laboral en España no logra incorporar la alta cantidad de titulados universitarios, posicionando al país en primer lugar en la UE por sobrecualificación. Según el informe Monitor de la Educación y la Formación de la CE, el 35% de los graduados desempeña trabajos por debajo de su nivel académico, en contraste con el promedio europeo de 21,9%.
El análisis destaca que el porcentaje de jóvenes españoles con estudios superiores es del 52,6%, ocho puntos por encima de la media comunitaria y superando el objetivo del 45% fijado para el año 2030. Sin embargo, se mantiene un desajuste entre la formación recibida y las demandas reales del mercado de trabajo, presentando bajas tasas de empleo para graduados en áreas como humanidades, artes y ciencias sociales.
Simultáneamente, el mercado laboral requiere cada vez más especialistas en tecnología y digitalización, donde las ofertas de empleo por candidato superan la media europea en un 212%. El informe también resalta la falta de programadores, técnicos y operarios manuales, frente a una saturación de titulados en campos como Administración, Derecho o Periodismo, con índices de afiliación a la Seguridad Social inferiores al 72%.
Además, la CE señala que España no alcanza las expectativas en cuatro de los siete indicadores de desempeño educativo, incluyendo las competencias digitales, donde el 44% de los estudiantes no logra los niveles mínimos requeridos para desenvolverse en la sociedad digital, triplicando la meta europea para 2030.
El mensaje desde Bruselas es claro: para mejorar la inserción laboral, España debe adecuar la oferta educativa a la demanda del mercado, impulsando las carreras centradas en ciencias, tecnología y formación técnica, al tiempo que ajusta la educación universitaria para evitar la sobrecualificación de sus graduados.


