La Policía Local, de la Consejería de Presidencia y Gobernación, se ha sumado esta semana a la campaña de control y vigilancia sobre el transporte escolar emprendida por la Dirección General de Tráfico, en la que los funcionarios de la Ciudad colaborarán en esta campaña, en la que se intensificarán las labores de inspección de los vehículos destinados al transporte escolar, comprobando la documentación relativa a las autorizaciones necesarias para la prestación del servicio, así como del propio vehículo en relación a sus condiciones técnicas y elementos de seguridad. También se prestará especial atención al conductor profesional, su habilitación y permiso de conducción, así como sus tiempos de conducción y descanso
Esta campaña, que se ha iniciado este lunes y se prolongará hasta el día 26, pretende contribuir a reducir el número de accidentes e incidencias de circulación en el transporte escolar, especialmente en zona urbana, teniendo en cuenta que está comprobado que a una velocidad de 50 km/h, la máxima permitida en vías urbanas, las posibilidades de que un niño sobreviva sin ninguna medida de seguridad es nula y que ni siquiera a poca velocidad se garantiza su supervivencia.