Los primeros efectos de las obras que se llevan a cabo en el lado marroquí de la frontera con Ceuta ya son evidentes, provocando extensas filas de vehículos y tiempos de espera que pueden llegar a las seis horas para ingresar a la ciudad española desde Marruecos.
Videos compartidos por ciudadanos y activistas como Driss El Ouhabi revelan congestión vehicular incluso en días laborables. En una grabación, El Ouhabi señala: “Como se observa, muchas personas están entrando desde Marruecos hacia Ceuta. No es un fin de semana ni un sábado, sino un lunes, y aún así el atasco en la frontera es considerable.”
Esta situación ha sido descrita como una “auténtica dificultad” debido a las prolongadas esperas. La principal causa del congestionamiento responde a las obras que bloquean algunas salidas vehiculares, dejando habilitados únicamente tres carriles para el ingreso a Ceuta.
El plan para la adecuación fronteriza prevé la reestructuración del tráfico en seis carriles: tres destinados a la entrada desde Marruecos y tres para la salida hacia Marruecos. Las obras se desarrollan en dos fases: primero se interviene la zona inferior, próxima al mar, que corresponde a la entrada a Ceuta; después se actúa en la parte superior, referente a la salida hacia Marruecos.
Durante este proceso, los usuarios del paso fronterizo enfrentan retrasos y congestión, mientras las autoridades completan la reordenación para optimizar la operatividad del cruce.



