Michael Burry, reconocido por anticipar la crisis hipotecaria de 2008, emitió este miércoles una advertencia significativa respecto al sector tecnológico, poniendo en duda la legitimidad de los ingresos reportados por las principales compañías de inteligencia artificial.
Las declaraciones del inversionista se produjeron pocas horas después de que Nvidia diera a conocer resultados del tercer trimestre mejores de lo previsto, favorecidos por la creciente demanda de sus productos relacionados con IA, lo que impulsó una subida general en las acciones tecnológicas a nivel mundial.
Mediante sus redes sociales, Burry difundió un gráfico que mostraba acuerdos de inversión en IA entre empresas como Microsoft, OpenAI, Oracle y Nvidia. En él denunció una práctica de “reconocimiento de ingresos cuestionable”. Afirmó: “Con el tiempo, esto será visto como un fraude, no como un simple fenómeno pasajero. La demanda real final es extremadamente pequeña. La mayoría de los clientes están financiados por los mismos distribuidores”.
Además, el inversor señaló directamente a OpenAI como el “centro neurálgico” y cuestionó la función del auditor de esta startup de inteligencia artificial. También mencionó que mantiene posiciones cortas en Nvidia y Palantir, y sugirió que algunos inversores podrían estar reportando incorrectamente la depreciación de sus activos en centros de datos.
Por otro lado, Jensen Huang, director ejecutivo de Nvidia, rechazó la noción de que exista una burbuja en el sector de la IA, asegurando que la demanda de sus productos supera ampliamente a la de los grandes hiperescalares de la industria.
Tras la publicación de los resultados, las acciones de Nvidia se incrementaron más del 5% en operaciones posteriores al cierre, mientras que otros valores tecnológicos y de IA también experimentaron ganancias significativas, lo que impulsó los futuros de los principales índices bursátiles estadounidenses.
