El rey Mohamed VI ha instado a los diputados del Parlamento marroquí a asumir su responsabilidad con “espíritu de seriedad” y a situar los intereses de los ciudadanos en el centro de su acción política. Durante el discurso de apertura de la sesión de otoño del Parlamento, el monarca subrayó que no debe existir competencia estéril entre los grandes proyectos nacionales, siempre que el objetivo común sea impulsar el desarrollo del país y mejorar la calidad de vida de la población.

El rey enfatizó la necesidad de reforzar la comunicación con los ciudadanos y de explicar con claridad las iniciativas emprendidas por las autoridades públicas, especialmente en lo relativo a las libertades y derechos fundamentales. En este sentido, señaló que esta labor no recae únicamente sobre el Estado, sino que constituye una responsabilidad compartida por los partidos políticos, los representantes electos, los medios de comunicación y todas las fuerzas vivas de la nación.
Mohamed VI reclamó también una aceleración en el ritmo de los programas de desarrollo territorial, poniendo el foco en la creación de empleo, la mejora de los sistemas de salud y educación, así como en la atención prioritaria a las zonas más vulnerables, entre ellas las regiones montañosas y las zonas de oasis. Asimismo, insistió en la importancia de aplicar de forma eficaz los mecanismos de desarrollo sostenible en las costas nacionales.
El mensaje del monarca llega en un momento en el que Marruecos enfrenta importantes retos socioeconómicos y busca consolidar su modelo de desarrollo bajo una visión de cohesión territorial y justicia social.
