La Lotería de Navidad representa mucho más que un simple sorteo: cada 22 de diciembre, millones de españoles participan en una tradición llena de ilusión y esperanza. Este evento, con más de dos siglos de historia, señala el comienzo de las festividades navideñas, reuniendo a familiares, amigos y compañeros en torno a décimos compartidos y sueños comunes. El codiciado Gordo, con un premio de 4 millones de euros por serie, convierte esta fecha en una cita destacada, seguida también por políticos y personalidades.
Entre los jugadores estaba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien obtuvo un pequeño premio con sus décimos el año pasado. La historia del líder socialista atrajo la atención de los medios, evidenciando que la suerte puede sonreír a cualquier persona, independientemente de su posición.
El 22 de diciembre de 2022, Sánchez ganó un total de 320 euros a través de premios menores: 200 euros por dos décimos adquiridos en la sede del PSOE en Ferraz y 100 euros por otro décimo de la oficina de Prospectiva y Estrategia de País a Largo Plazo. Aunque la cantidad no fue elevada, el presidente compartió la noticia con satisfacción, pues era la primera vez que resultaba premiado en esta tradición.
La participación de personajes públicos como Sánchez plantea cuestiones sobre la legalidad de jugar a la Lotería de Navidad. Conforme a la Ley 13/2011 de Regulación del Juego, está prohibida la participación de menores de 18 años, personas con adicción al juego, directivos de Loterías y Apuestas del Estado y sus familiares hasta segundo grado, además de miembros de la Comisión Nacional del Juego y organizadores del sorteo. No obstante, políticos y ciudadanos con capacidad legal pueden participar sin inconveniente, como lo demostró el presidente.
El caso de Pedro Sánchez en la Lotería de Navidad recuerda que, aunque no siempre se gane el Gordo, la ilusión compartida sigue siendo uno de los principales valores de estas celebraciones en España.


