El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), componente fundamental de la reforma de pensiones, verá incrementado su tipo de cotización a partir del 1 de enero de 2026. De acuerdo con lo publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), la contribución total pasará del 0,8% al 0,9% sobre la base de cotización, lo que supondrá una leve reducción en las nóminas de numerosos trabajadores y un aumento en el Fondo de Reserva de la Seguridad Social.
Desde 2023, el MEI implica una cotización adicional en las nóminas con la finalidad de fortalecer los recursos de la Seguridad Social y asegurar el pago de las pensiones, especialmente ante la jubilación masiva del grupo del baby boom. Esta medida está prevista para mantenerse, en principio, hasta 2032.
Modificaciones en la nómina para 2026
El aumento que entrará en vigor el 1 de enero de 2026 elevará la contribución total del MEI al 0,9% sobre la base de cotización, repartido de la siguiente forma:
- Empresas: asumirán el 0,75%.
- Trabajadores: aportarán el 0,15% (frente al 0,13% previsto para 2025).
Por ejemplo, un empleado con una base de cotización de 1.500 € brutos tendrá una deducción de 2,25 € por el MEI, mientras que para un salario de 2.000 € brutos, la aportación del trabajador será de 3,00 €.
Progresión gradual del MEI
La implantación del MEI se realizará de forma paulatina, aumentando su porcentaje conforme a la siguiente tabla:
- 2027: alcanzará el 1% (0,83% empresa / 0,17% trabajador).
- 2028: subirá al 1,10% (0,92% empresa / 0,18% trabajador).
- 2029: llegará al 1,20% (1% empresa / 0,20% trabajador).
- 2030 a 2050: se mantendrá en 1,20%, pero con una distribución equilibrada del 0,6% para empresas y 0,6% para trabajadores.
Exenciones a la obligación de cotizar
El BOE especifica ciertas exclusiones respecto a la obligación de contribuir al MEI:
- Jubilación activa: quienes están jubilados y continúan trabajando quedan exentos.
- Formación y prácticas: trabajadores en programas formativos o contratos de prácticas no realizan esta cotización.
- Contingencias profesionales: quienes cotizan únicamente por contingencias profesionales, sin incluir jubilación, están exentos.
El reto de la sostenibilidad
Esta medida responde al desafío demográfico que enfrenta el sistema de pensiones en España. Según datos citados por Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco, se estima que en la próxima década más de 5,3 millones de personas de 55 años o más saldrán del mercado laboral, mientras que las nuevas incorporaciones, entre jóvenes de 6 a 15 años, serán alrededor de 1,8 millones.
Mesonero destaca que «en un país con un marcado déficit en el relevo generacional, apostar por el talento senior no es una opción, sino una necesidad», ya que mantener en el empleo a profesionales mayores de 50 años resulta fundamental para sostener la productividad, facilitar la transferencia del conocimiento y, principalmente, garantizar la viabilidad del sistema de pensiones.
