Telefónica atraviesa un nuevo cambio relevante en su dirección en medio de una etapa marcada por ajustes laborales importantes y una reorganización estratégica bajo el liderazgo de Marc Murtra. En esta ocasión, Gonzalo Martín‑Villa, uno de los ejecutivos con mayor vinculación al equipo anterior, ha decidido dejar la compañía tras más de veinte años de trayectoria.
Martín‑Villa, quien recientemente desempeñaba el cargo de director general de la división de Infraestructuras, Activos Inmobiliarios y Responsabilidad Social Corporativa —una área establecida para mejorar la gestión bajo la supervisión de Javier de Paz— se despedirá de Telefónica en las próximas semanas para emprender nuevos proyectos empresariales fuera del grupo.
Su salida, acordada de forma voluntaria según fuentes cercanas, se produce en un momento complejo para la multinacional española de telecomunicaciones. Recientemente, la compañía alcanzó acuerdos con representantes sindicales para poner en marcha planes de salida voluntaria que afectarán a miles de empleados en distintas filiales, en el marco de un plan de transformación orientado a potenciar la competitividad y la eficacia operativa.
Este proceso de reestructuración se da en un contexto de fuerte presión financiera: Telefónica ha asumido el compromiso de reducir gastos con un plan ambicioso que contempla la salida de cerca de 5.500 trabajadores en España a través de acuerdos colectivos, con provisiones estimadas en torno a 2.500 millones de euros y previsiones de ahorro anual a partir de 2028.
La despedida de Martín‑Villa —reconocido por su larga trayectoria, que incluye responsabilidades destacadas desde la creación de la aceleradora Wayra hasta cargos de liderazgo en áreas digitales— subraya la etapa de renovación ejecutiva que atraviesa Telefónica, con nuevas prioridades y una actualización del liderazgo en sectores estratégicos.
Esta reorganización se desarrolla durante la implementación del plan estratégico 2026‑2030, que orienta a Telefónica hacia un perfil más digital, flexible y centrado en sus mercados europeos principales, mientras navega un entorno competitivo exigente y en continuo cambio.


