Las esperanzas de una tregua en el conflicto de Ucrania se han reducido tras recientes declaraciones de Rusia. Aunque EE.UU. y Ucrania mantuvieron una reunión reciente, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, indicó que las intenciones de Rusia van más allá de detener temporalmente las hostilidades.
Peskov afirmó: «Buscamos una paz definitiva, no una tregua que permita a Ucrania reabastecerse y reanudar el enfrentamiento», dejando claro el propósito de Moscú en la resolución duradera del conflicto.
El plan de paz propuesto por Donald Trump ha sido rechazado por las autoridades rusas. Yuri Ushakov, asesor de política internacional de Putin, expresó escepticismo respecto a un posible acuerdo, señalando que las modificaciones solicitadas por Ucrania no serán aceptadas.
A pesar de la posición rusa sobre la tregua, el presidente estadounidense ha mostrado optimismo respecto a la paz, indicando que está «más cerca que nunca», aunque la situación sobre el terreno sigue siendo tensa.
El conflicto se complica adicionalmente por las garantías de seguridad solicitadas por Ucrania. Informes indican que Washington ha ofrecido condiciones similares a las de un país miembro de la OTAN bajo el Artículo 5, sin permitir la incorporación formal a la Alianza.
Volodimir Zelenski, presidente ucraniano, mencionó la existencia de un documento que detalla estas garantías, incluyendo la posibilidad de presencia de tropas extranjeras en su territorio. «Necesitamos seguridad completa en tierra, aire y mar», explicó Zelenski.
No obstante, Moscú respondió negativamente a estas garantías. Serguéi Lavrov, ministro de Exteriores ruso, señaló que la discusión sobre seguridad no debe centrarse exclusivamente en Ucrania. Además, Serguéi Riabkov, subsecretario ruso, afirmó que Rusia jamás aceptará tropas de la OTAN en su entorno inmediato.
El incremento de las tensiones también está relacionado con la insistencia de Rusia en anexar territorios ucranianos. Riabkov declaró que este acto es fundamental, y su ausencia pondría en peligro la integridad del Estado ruso según su Constitución.
En 2014, Rusia anexó Crimea por decisión unilateral y ha seguido políticas semejantes con Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón tras el inicio de la guerra en 2022. Sin embargo, las fuerzas rusas no controlan completamente estas zonas, lo que añade incertidumbre a la crisis.
Finalmente, Rusia rechaza cualquier posibilidad de compensación económica hacia Ucrania por la guerra. Mientras las negociaciones avanzan, los líderes europeos planean un nuevo encuentro para abordar la crisis, enfocándose en el uso de activos rusos congelados para apoyar financieramente a Ucrania.


