El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha tomado una decisión destacada al rebajar los aranceles sobre diversas importaciones agrícolas fundamentales. Esta acción afecta productos como el café, el plátano y ciertos cortes de carne de res, con el objetivo de aliviar la presión sobre los precios de los alimentos en el mercado estadounidense.
La eliminación de estos aranceles fue formalizada mediante una orden ejecutiva publicada por la Casa Blanca y se aplica de manera inmediata. Su propósito es hacer más accesibles estos productos para los consumidores, mientras se buscan controlar los precios al consumidor durante un periodo de alta inflación.
Además, la directiva establece que el Departamento del Tesoro junto con la Oficina del Representante Comercial deben suspender temporalmente los impuestos adicionales y evaluar el impacto económico de esta medida. Esta estrategia refleja un enfoque más flexible en las políticas comerciales comparado con el mandato anterior.
Entre los bienes agrícolas beneficiados se incluyen, además de los ya mencionados, tomates, aguacates, cocos, frutas como naranjas y piñas, así como té y especias relevantes en la industria alimentaria, entre ellas la canela y la nuez moscada.
La Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, reconocida como el tercer mayor productor mundial de café, ha manifestado su aprobación ante esta decisión. Germán Bahamón, presidente de la organización, subrayó en redes sociales la importancia de esta medida para el sector cafetero global y agradeció al gobierno estadounidense por atender sus inquietudes.
Asimismo, la Asociación Brasileña de Industrias Exportadoras de Carnes valoró positivamente esta reducción fiscal, señalando que provee mayor certidumbre al sector y facilita las operaciones comerciales, en particular tras periodos con aranceles elevados que afectaron su competitividad en el mercado de Estados Unidos.
Históricamente, Brasil ha sido uno de los principales exportadores de carne bovina a Estados Unidos. Sin embargo, los aranceles adicionales impuestos anteriormente por Trump restringieron esta comercialización, y la nueva medida podría restaurar su papel como uno de los principales proveedores en este mercado.
El objetivo de esta modificación es claro: contener los precios en los supermercados y responder a las críticas recibidas tras la pérdida de varias elecciones locales por parte de los republicanos. También busca mejorar las relaciones comerciales con países de América Latina, como Argentina, El Salvador, Ecuador y Guatemala, con los que se han estado estableciendo recientes acuerdos comerciales.
