Dos operaciones financieras significativas —una en aviación civil y otra en defensa— reflejan el crecimiento del capital turco en sectores clave de la economía española, consolidando una influencia creciente de Ankara en el país.
Recientemente, el avance de las empresas turcas en España se ha concretado en dos movimientos relevantes. En primer lugar, Turkish Airlines ha adquirido aproximadamente un 26 % del capital de Air Europa, tras invertir cerca de 300 millones de euros, lo que abre nuevas oportunidades en el mercado de aviación civil.
Simultáneamente, la colaboración entre Airbus y Turkish Aerospace Industries (TAI) se ha adjudicado un contrato valorado en 2.600 millones de euros. Este acuerdo está destinado a proporcionar al Ejército del Aire y del Espacio español un sistema avanzado de entrenamiento y modernización, que incluye aeronaves de entrenamiento avanzado, simuladores y un sistema logístico, marcando un progreso notable en la cooperación industrial bilateral.
Aunque las operaciones mencionadas corresponden a ámbitos diferentes —civil y defensa— ambas evidencian el modo en que Turquía se posiciona en sectores estratégicos de España mediante inversiones directas, alianzas industriales y presencia de capital extranjero. Esta dinámica tiene tanto implicaciones económicas como geopolíticas, dado el carácter sensible de estos sectores.
Este fenómeno no es aislado. En años recientes, España y Turquía han fortalecido sus vínculos económicos, firmando memorandos de entendimiento para fomentar inversiones conjuntas, colaboración tecnológica y comercio en áreas como energía, infraestructura, tecnología y movilidad.
Implicaciones de la creciente presencia turca en España
- Incremento de la influencia turca en sectores clave como transporte, defensa y aviación.
- Evolución de las inversiones internacionales que modifican alianzas industriales tradicionales en España.
- Fortalecimiento del tejido empresarial y tecnológico a través de la cooperación entre compañías españolas, europeas y turcas.
- Debate sobre la dependencia externa, la soberanía industrial y el control estratégico en infraestructuras sensibles cuando existe participación de capital extranjero.
Esta reciente expansión de empresas e inversiones turcas en España señala un punto de cambio en la estructura económica e industrial del país. Con una participación que abarca la aviación civil, defensa y colaboraciones estratégicas, Turquía se establece como un socio relevante. No obstante, esta situación también plantea cuestiones relativas a la soberanía, el control y el equilibrio entre la inversión extranjera y la seguridad nacional.


