Una década tras el asesinato de Francisco M.G., conocido como Paco el Kiosquero, la Policía Nacional ha logrado arrestar a uno de los presuntos responsables gracias a una huella dactilar hallada en la entrada del edificio donde se produjo el ataque.
La víctima fue agredida hasta morir en 2015 en Marbella, un suceso que impactó a la comunidad y que permaneció sin resolverse a pesar de los primeros esfuerzos. Recientemente, la Unidad de Delitos Violentos volvió a examinar el caso y detectó una huella que había pasado inadvertida en investigaciones anteriores.
Al cotejarla con bases de datos actualizadas, los agentes identificaron a uno de los sospechosos, quien tenía antecedentes por delitos similares. Después de varios meses de vigilancia y seguimiento de sus movimientos, se procedió a su detención.
Desde la Policía informan que las pesquisas continúan para encontrar al segundo implicado y así concluir un caso que ha estado abierto durante diez años.
