En la Comisión de Hacienda de la Asamblea de Ceuta, el Grupo Parlamentario Vox fue el único que manifestó su rechazo al proyecto de Presupuesto para 2026. Por su parte, PSOE, MDyC y Ceuta Ya! optaron por abstenerse, mientras que el Partido Popular y tres diputados no adscritos dieron su voto favorable.
En un comunicado firmado por su portavoz, Juan Sergio Redondo, Vox criticó la aprobación de estas cuentas, señalando que el Partido Popular logró aprobarlas apoyándose en los votos de diputados tránsfugas. Según la formación, dicho presupuesto está condicionado por intereses particulares y no prioriza el bienestar de los ciudadanos ceutíes.
Vox subrayó la importancia de que presupuestos de gran relevancia para la ciudad no dependan de representantes que no encarnan un proyecto político ni a la población. En este sentido, la formación advirtió que rechazará categóricamente que el futuro de Ceuta se decida con apoyo de diputados tránsfugas.
Además, Vox manifestó que el presupuesto incluye concesiones orientadas a entidades islamistas y grupos alineados con Marruecos, destinadas a satisfacer a los tránsfugas y mantener en el poder al gobierno liderado por Juan Vivas. Según Redondo, esta situación evidencia que el presidente gobierna más para proteger sus propios intereses y apoyos que para atender el bien común de Ceuta.
El portavoz de Vox añadió que a Juan Vivas parecería no preocuparle el coste para Ceuta y estaría dispuesto a comprometer el futuro de la ciudad para preservar su puesto. Por ello, señalaron que estas cuentas están diseñadas para garantizar la estabilidad en la presidencia y no para promover el bienestar de la población.
Vox también defendió que los presupuestos deberían estar enfocados exclusivamente en el interés general, que implica fortalecer los servicios públicos, fomentar el empleo, combatir la exclusión social, garantizar la seguridad, proteger la identidad española y asegurar un uso responsable y transparente de los recursos públicos.
Finalmente, la formación aseguró que continuará promoviendo en la Asamblea unas cuentas que respondan verdaderamente a las necesidades de la ciudadanía y que no estén condicionadas por acuerdos oportunistas o por intereses personales o de grupos que no representan a Ceuta.
En resumen, Vox mantiene una postura firme en contra del presupuesto aprobado, al considerar que fue aprobado gracias a un apoyo discutible y que perjudica el futuro de Ceuta por intereses particulares y concesiones controvertidas, apostando por una administración pública transparente y orientada al bienestar social.



